Bienvenido.
Usted ha sido ungido con una muy alta investidura de la Nación Argentina para aportar al bien de todos.
Dependerá de su criterio y compromiso con ella que los tiempos por venir en su gestión sean condicionados o estables.
Usted entiende que dependerá de su responsabilidad hacer honor a tan tremenda responsabilidad.
Seguramente tendrá muchos temas para afrontar. Uno de ellos podría llegar a ser emitir una opinión.
En ciertas circunstancias podría llegar a representarse inevitablemente en palabras, gestos o actividades rebasando incluso el marco estrictamente institucional comprometido.
Estas podrán resultar de respaldo, en oposición, incluso de silencio y aún de retiro voluntario.
Usted conoce que existen algunos interesados en promover sutilmente la idea de la injusticia cometida frente a la luz de los resultados obtenidos de las urnas el 27/10/13.
También de la convicción de los mismos de batallar como sea aún apelando a metodologías algo reñidas con la Ética para tratar de evitar un destino que hoy por hoy parece inexorable aunque no inminente. Dentro de la Democracia, claro está.
¿Y si la economía comenzará a hacer mella en el sentimiento popular ?.
Es claro que es solo la opinión de algunos frente a la realidad de amigos que deberán irse y lógicamente responder ante el Pueblo Argentino por algún error cometido en su gestión.
Es de mi obligación informarle que existen otros grupos civiles jóvenes con etiqueta conocida que también están encolumnados en aquel objetivo.
Es elemental comprender que la autovictimización no es una estrategia ni siquiera una táctica sino apenas una treta harto conocida para levantar alguna ponderación de algunos desprevenidos poco informados.
No me estoy dirigiendo a una paloma poco emplumada ni a un halcón sino a un argentino.
Aspiro de usted a una postura inflexible de “firme junto al Pueblo”, ante la libertad de expresión y de la Defensa Nacional.
Para la seguridad existen otros estamentos constitucionales.
Usted recordará lo ocurrido hace 37 años.
En las circunstancias actuales creo que no debiera resultar opinable su pasión joven en el respeto irrestricto de nuestra Constitución.
El verdadero poder deviene del reconocimiento y el ejercicio de la verdad escondida en la complejidad creciente de la realidad, incluso la propia y la de todos.
Es mi relato pero caben otros.
Viendo lo que he visto es de tolerancia cero.
Éxitos.
PD : En las librerías se expenden ejemplares de Mein Kampf, de El Capital, de la Razón de mi vida, de Contrato Social y de El Príncipe.
¿Cual elegiría para una primer lectura diferente?.
Chau…
Lic. Morató Carlos
DNI : 4741922